Pueblo Viejo.- En la zona hay cerca de mil mujeres que se dedican a la pesca, muchas apoyando a sus esposas, pero un grupo de 300 de ellas, son madres solteras o viudas, las cuales sobreviven como pueden debido a que no acceden al empleo temporal y padecen para sacar adelante a sus hijos, a esto se suma los daños que el gasoducto podría ocasionar a la laguna.
Al respecto Francisca Castillo Silva líder de pescadores libres manifestó que este grupo de mujeres abarca la zona ejidal desde el ejido Mata de Pedernales, el Crucero y toda la Congregación Anáhuac, solo cuentan con apoyos de programas de 65 y más en el caso de las de mayor edad, sin embargo la mayoría no cuentan con este apoyo y para sobrevivir en temporadas de veda ya que muchas son viudas y la mayor parte han sido abandonadas por sus parejas.
Francisca Castillo Silva indicó que en su momento luchó y gestionó el apoyo federal esto al ser coordinadora de Sedesol, sin embargo este no es suficiente, agregó que por ello se buscan más apoyo porque son uno de los grupos más vulnerables y a esto se suma las vedas, por otra parte dijo que si el paso del gasoducto de las empresa Transcanadá sería el acabose de todos los pescadores por ello se buscaría que a las pescadoras se les indemnice de por vida de lo contrario las van a terminar matando de hambre.
