Ahora resulta que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se escandaliza de las prácticas que ellos mismos perfeccionaron y cometieron hasta el cansancio.
Tienen la desfachatez de quejarse y señalar a quienes hoy están en el poder, tanto el PAN como Morena, de condicionar la entrega de apoyos a cambio de votos para las elecciones del próximo 2 de junio.
El encargado del área jurídica del PRI, Alejandro Torres Manzur, acudió a la zona sur de Tamaulipas para despotricar contra el gobierno del estado y la federación acusándolo de delincuentes electorales. ?Acaso se les olvida lo más de 80 años que ellos estuvieron en el poder e hicieron exactamente lo mismo?
Con esto no queremos justificar las acciones ilegales que pudieran llegarse a cometer en campañas o comicios, es más exhortamos a que se castiguen si es se las hay, pero los menos indicados para puntualizarlas son justamente los priistas.
Además de ser desmemoriados son cínicos, ya que los muy caradura ponen denuncias a diestra y siniestra por ataques contra sus candidatos a diputados locales, que dicho se de paso están entre desconocidos y oportunistas.
El “santo” priista arremetió contra el gobierno de Cabeza de Vaca y de López Obrador, los delegados de Bienestar Social y hasta los alcaldes, asegurando que usan recursos económicos y humanos con fines electoreros.
Acaso el señor, que dice no es mentiroso, olvida el gobierno de Egidio Torre, Eugenio Hernández, Tomás Yarrington, Manuel Cavazos Lerma, por mencionar algunos donde el dinero público corría a raudales en compra de votos y de estos dos están presos y no por buenas personas.
Que sus líderes de secretarías y colonia entregaban despensas a cambio de credenciales de elector, perdón señor Torres Manzur pero para pararse a señalar eso hay que tener muy corta memoria.
Denunciaron desde el alcalde Matamoros y Ciudad Victoria hasta la delegada de Bienestar Social en Madero, Angelica de la Garza, de quienes no soportan los actos de intromisión en el proceso electoral.
Deberían tener un poco de vergüenza y medir sus declaraciones escandalosas, ya que ahora resulta que son de piel muy sensible y exigen respeto. Cuanta ridiculez.
Para hacer señalamientos hay que tener evidenciad y no solo dichos, denuncias y no solo declaraciones, pero sobretodo hay que tener la cola muy corta para evitar que la pisen.
Lo único que buscan es negociar con el PAN para ocupar puestos en el gobierno del Estado como lo ha dicho en corto la candidata Mayra Ojeda, pero es poco lo que tienen para obtener beneficios políticos que ya les quedan grandes.
Los priista deberían aceptar que en Tamaulipas ya son un partido muerto y que difícilmente podrán revivir a lo que ellos mismos con prácticas que hoy señalan mataron.
