La llegada de los paseantes de invierno, mejor conocidos como winter texans a la zona sur de Tamaulipas causó gran revuelo y una presunción exagerada por parte del gobierno de Ciudad Madero, que se pintó como el salvador del turismo de la región.
La llegada de estos turistas sin duda es relevante, ya que levantan el castigo impuesto a la zona sur de la entidad desde el año 2009, primero por el brote de influenza y después por la inseguridad desbordada que en algunos puntos de la entidad siguen vivos y lastimado al Estado.
El problemas de este regreso de los paseantes extranjeros es que los han sacado de contexto, exagerando que este suceso ha generado la mejora de la percepción del mundo en lo que es la zona sur de Tamaulipas, lo que está muy lejos de ser realidad.
Del 18 al 21 de febrero estuvieron en esta zona sur de Tamaulipas un total de 81 paseantes de Estados Unidos y Canadá quienes arribaron atraídos por la fiesta del Carnaval Playa Miramar 2018 rompiendo esa mala racha de años ausentes.
Lo que si hay que ponderar es el valor de estos turistas quienes desatendiendo las recomendaciones del gobierno de Donald Trump decidieron ingresar a Tamaulipas, trasladarse por su territorio hasta llegar al sur donde aseguran no se la pasaron nada mal.
Ojalá Tamaulipas vuelva a ser atractiva para los turistas extranjeros y supremos esos años aciago donde las balas, secuestros y levantones se convirtieron en parte de nuestra cotidianidad.