Buscando la manera de asegurar “el hueso” otros tres años, decenas de empleados municipales han abandonado sus funciones para las que fueron electos o contratados representando una verdadera desbandada de burócratas que se sumaron a las campañas electorales en distintos partidos.
Son 53 los que hasta el día de hoy se han separado por renuncia, licencias o permisos encabezados por el propio alcalde José Andrés Zorrilla Moreno quien pese a que constantemente mencionó que su compromiso era por todo el periodo para el que fue electo ahora dejó el puesto para buscar la reelección.
Y con ese ejemplo el resto de los funcionarios incluidos de primero y segundo nivel como la primera regidora Crystal González López; la secretaria particular e incondicional Patricia Guzmán; el secretaria de servicios públicos Andrés González García; los directores María de los Ángeles Rojas -quien además aparece en la terna para ser alcalde sustituta-, Juan Felipe Gutiérrez Toscano, encargado de juventud y antes presidente de Morena; Victor Martínez titular de comunicación social, entre otros.
Todos presentaron sus peticiones a la Dirección de Recursos Humanos que ahora no sabe como tapar tantos huecos que dejaron los chapulines que lejos de preocuparse por hacer bien su trabajo garantizan seguir en la administración por andar bandereando o pegando calcas.
Aseguran que no afectará la desbandada de estos funcionarios chapulines, pero si usted o yo acudimos a la presidencia municipal se dará cuenta que si los servicios antes eran lentos ahora están lujo peor, ya que prácticamente nadie acude a trabajar.
La mayoría de los renunciados se van a la campaña de su jefe Zorrilla, ósea de la coalición “Por Tamaulipas al Frente” integrada por el Partido Acción Nacional, Partido de la Revolución Democrática y el Movimiento Ciudadano.
En la bola de los que andan haciendo buya aparecen personajes de no muy buena reputación como Ricardo Villarreal, quien es conocido por su alta traición o Roberto Enrique Morales quien fue despedido de la dirección de atención a la juventud por malos tratos.
La partida de los funcionarios y empleados municipales no representarán ahorros para el municipio ya que aunque en papel y en acciones ya no están trabajando, estos siguen recibiendo sus pagos o compensaciones por debajo del agua.
Una verdadera lástima que los vicios tan criticados del PRI hoy encuentren espacio en quien los señalo de manera reiterada.