Derivado de diversos factores que pueden incluir la sobreexplotación de la laguna de Tamiahua el uso de redes de arrastre que han dañado las especies y los diversos cambios climáticos, la pesca para pescadores en Cabo Rojo se ha reducido a niveles importantes en los últimos años.
Don Pedro Maya, integrante de la cooperativa de Cabo Rojo, Indicó que durante el mes de febrero se mantuvo la vida de lisa y lebrancha, y sigue la del camarón de este la cantidad que se captura cada vez es menos y el ejemplar es de menor tamaño.
Indicó por lo anterior que las capturas se han reducido de forma muy drástica al grado de que no habido excedente para la venta y a esto se suma que el economía de la gente está muy afectada por la pandemia del coronavirus.
“En las últimas semanas me he dedicado a capturar un poco de huevina o trucha, pero sale muy poca, prácticamente lo que obtengo es para llevárselo a la familia”.
Muchos de los pescadores de la cooperativa realizan también labores como jornaleros y otras actividades en el campo para buscar obtener otros ingresos porque de la pesca directamente no se puede vivir” afirmó.